Armando Matta R.

Especialista en Economía Ecológica y Ambiental

Economista

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La semana pasada estábamos hablando sobre la adicción producida por consumir nicotina. La nicotina al igual que otras drogas, generan adicción por varios factores entre los que podemos encontrar la liberación de neurotransmisores. Estos neurotransmisores crean una sensación de felicidad como la dopamina que se libera como un sistema de recompensa incitando a la repetición de los actos para poder seguir obteniendo ese sistema de recompensas.

Por la razón antes mencionada describí como funcionan 4 neurotransmisores, basado en varias fuentes que se pueden consultar en esa columna, a los que se les llaman “las hormonas de la felicidad”, estos son: La dopamina, la serotonina, la oxitocina y las endorfinas.

Un breve resumen poner en contexto es que estos neurotransmisores son sintetizados en diferentes partes del cuerpo, mayormente en el hipotálamo, la sustancia negra, el intestino, el sistema digestivo y el sistema nervioso central. Para su estimulación se recomienda una dieta saludable, en el caso de la serotonina es importante consumir alimento que contengan triptófano, vitamina b6 y magnesio, se debe hacer ejercicio de manera regular (el ejercicio lo resalto mucho porque influye bastante y no sólo para los neurotransmisores sino para la vida en general) con alta importancia en el cardio, la luz solar, tener amigos o vínculos sociales sólidos, establecer metas, dar y recibir abrazos (no balazos), a través del placer como los orgasmos, hasta consumir picante.

La liberación de estos neurotransmisores nos beneficia en múltiples áreas como la concentración, la atención, el aprendizaje, la capacidad cognitiva, las funciones motoras, la reducción de estrés, el sueño, el metabolismo, mantener un cuerpo joven; sirven como analgésicos naturales, sensación de felicidad, depresión y un largo etc.

Y para terminar el resumen, el tabaquismo es algo que preocupa a todo el mundo, al fumador porque directamente le está afectando su salud, por introducir más de 7000 químicos muy nocivos, entre los que mencioné: Amoníaco, dióxido de carbono, monóxido de carbono, propano, acetona, cianuro de hidrógeno, (NIH, 2022). Al que está junto al fumador, porque se convierte en uno pasivo, a los agricultores, a los gobiernos por la recaudación de impuestos, a los comerciantes, a los encargados de la salud y un sinfín más de sectores.

Entre los métodos para dejar de fumar están los tratamientos de reemplazo de nicotina (TRN), como los parches o los chicles, medicamentos, vapeadores o cigarrillos electrónicos, terapia o simplemente la voluntad.

De las opciones para dejar el tabaquismo elegí el uso de vapeadores, por varias razones:

  1. Es un tema muy popular.
  2. Ofrece liberación de nicotina.
  3. Los costos pueden ser comparables con el hábito de fumar.
  4. Es una industria que está aumentando a pasos agigantados.
  5. Los vapeadores presumen de ser la mejor alternativa para dejar de fumar.

En una investigación sobre los efectos del “vapeo” se analizaron 78 estudios realizado a 22,052 fumadores activos con el propósito de verificar si el uso de estos cigarrillos electrónicos son realmente efectivos para dejar de fumar y si tienen algún efecto no deseado por usarlo constantemente (Hartmann-Boyce, y otros, 2022).

La conclusión a la que llegaron los investigadores es que hay una certeza alta en que los cigarrillos electrónicos aumentan el abandono de tabaco en comparación con los tratamientos de reemplazo de nicotina, en cuanto a la certeza de dejar el tabaquismo usando un “vapeador” comparado con hacerlo solo, es baja; y la conclusión sobre los efectos negativos de los vapeadores con nicotina a largo plazo es que son bajos. Es importante mencionar que los estudios sobre el daño negativo a la salud brillan por su ausencia (Hartmann-Boyce, y otros, 2022). Recuerda siempre consultar a un especialista para la toma de decisiones que involucren tu salud.

No existe una certeza sobre que hace más daño, si fumar o usor de e-cigarettes, porque para ello se requeriría realizar un estudio sobre los efectos en las personas que nunca han fumado o vapeado y dar seguimiento a los efectos de hacerlo durante un periodo de tiempo determinado. Nadie en su sano juicio (normalmente) se prestaría para llevarlo a cabo. Pero sabemos que el cigarrillo es humo que llevas a tus pulmones junto con 7000 sustancia químicas y los e-cigarettes son dispositivos que calientan una resistencia y al succionar el líquido (glicerina) del dispositivo pasa por esa resistencia que se calienta normalmente entre los 200 y los 300 grados centígrados transformándolo en vapor que es lo que finalmente se lleva a los pulmones.

La información a la mano sobre el vapeo, más la publicidad, la moda y el estatus a permitido que se vuelva popular, los otros sistemas para dejar el cigarrillo son menos eficientes porque hacen a un lado el tema social, lo que nos regresa a la emisión de la dopamina que se libera como sistema de recompensas convirtiendo una acción en hábito inducido por el deseo de repetir la acción que me produjo la liberación de dopamina en primer lugar; o la producción de oxitocina, mediante la integración y aceptación social, sustancia que produce la sensación de bienestar, placer y analgésico.

La gente se acostumbra a llevar un cigarrillo a la boca, esa acción se vuelve mecánica, así como exhalar humo y apreciar la nube que se forma, el “vapeador” permite imitar todas esas acciones convirtiéndolo en un sustituto perfecto en términos de mercado, cosa que un chicle nunca va a lograr.

El sustituto perfecto en términos económicos, tal y como su nombre lo indica, es un producto que cumple y cubre las necesidades de la misma forma o similar a como lo hace otro producto, el ejemplo que más me gusta usar es el de la mantequilla, el mercado encontró un sustituto perfecto, la margarina; hecha a base de grasas vegetales más saludables y a menor precio, con ese producto, las ventas de la mantequilla y su participación en el mercado se redujeron, no salió del mercado, pero se creó uno nuevo y es justo lo que está pasando con los cigarrillos y los vapeadores.

Los datos que presenta la OMS en su último informe sobre tabaquismo realizado a 165 países revelan que la cantidad de fumadores se ha reducido de 1320 millones en 2015 a 1300 millones en 2020 (OMS, 2021), son 20 millones de posibles compradores para equipo de vapeo.

Pero los exfumadores no son el único posible mercado, de hecho, no hay un estudio que demuestre que las personas que dejaron de fumar se pasaron al “vapeo”, pero desde el 2011 al 2019 el número de vapeadores en el mundo pasaron de 6 millones a 46 millones (La República, 2019), (toma en cuenta que después del 2019 el mercado se modificó debido a la pandemia). Es un gran número de usuarios en los que fácilmente caben los que dejaron de fumar.

Por otro lado, un número considerable de “vapers” son clientes nuevos y entre ellos están los jóvenes, quienes ingresan al mercado atraídos por sus abundantes sabores, modelos, características y sí, la aprobación social. Están ingresando al mercado con la misma edad que lo hacían los fumadores, desde los 10 años, lo que fácilmente puede presentar un nuevo problema de salud pública (Silva Numa, 2022).

El mercado de los sistemas electrónicos de administración de nicotina (SEAN) (nombre oficial de los vapeadores y también los hay sin nicotina SSSN) a nivel mundial alcanzó la cifra de 22.25 MMDD y la tasa compuesta de crecimiento anual del 2023 al 2030 se calculó en 30.6% (Grand View Research, 2023) así las ventas llegarán a 29 MMDD, así mismo, como te dije en la columna pasada, el mercado de cigarrillos tradicionales representa más de 141 MMDD (STATISTA, 2023), industria que seguirá disminuyendo al paso de los años y ese dinero no desaparece, va a migrar al mercado de los “e-cigarettes”.

Ahora, algo que no estamos considerando, es el efecto de la industria tabacalera positivo en el mercado, no quiero decir que la gente debe fumar, quiero sacar a relucir que hay gente que depende de esa industria, y esos trabajadores no podrán migrar, como lo va a hacer el dinero, a la industria de los e-cigarettes, aumentando la tasa de desempleo, las fábricas de los e-cigarettes son principalmente máquinas, formulas químicas y solo hay que ”pucharle play”. Mientras que la gente que trabaja en el cultivo de tabaco es considerable, en el 2003 en la industria tabacalera se empleaban a 100 millones de personas de las cuales 60 millones son recolectores y fabricantes (OIT, 2003).

Las tabacaleras también representan una importante influencia sobre los gobiernos, con grandes donaciones y por medio de la recaudación de impuestos, influyen en el frenando de políticas en contra de la distribución de los cigarrillos o apoyando candidatos para evitar la ya anunciada disminución del consumo de tabaco, obviamente se debe a la diminución en sus ingresos (Exposetobacco, 2021). Especulando, están tratando de ganar tiempo mientras realizan más estudios de mercado que les permita introducir otros productos sustitutos como IQOS de Philip-Morris, quienes ya proyectan que el 50% de sus ingresos sea por medio de e-cigarettes.

Por último, pero no menos importante, es que la migración del tabaquismo al “vapeo”, no es una alternativa para la economía personal, porque aunque los costos varían mucho de un producto a otro, la realidad es que una adicción siempre generará un costo, habrá quienes “vapeen” mucho y quienes lo hagan menos, algunos consumirán productos muy caros y otros optarán por productos baratos y desechables, pero al final, no considero que exista un ahorro sustancial y tampoco hay evidencia real al respecto.

Mi opinión final sigue el mismo curso que en la columna anterior, fumar y vapear representan problemas de salud pública. A eso le sumo, que si el objetivo es la salud de las personas y el vapeo es una alternativa para los fumadores que no logran dejar el nocivo consumo de cigarrillos, entonces debe ser regulado de forma eficiente, de tal manera que no exista una atracción del público joven y nuevo al vapeo, sino solo sea para exfumadores. Lo que veo imposible, los diseños y el tipo de mercadeo indica el propósito firme de atracción de clientes jóvenes a esta industria en crecimiento, lo que deja su lema de dispositivo como herramienta para dejar de fumar muy dudoso.

“Soy Armando Matta, todo es debatible ¿Tú qué opinas?”.

Notas: La información facilitada por este medio no puede, en modo alguno, sustituir a un servicio de atención médica directa o indirecta, así como tampoco debe utilizarse con el fin de establecer un diagnóstico, o elegir un tratamiento en ningún caso.

Esta columna no es ninguna recomendación, explícita o implícita, sobre fármacos, técnicas, productos, dietas, etc.… que se citaron únicamente con finalidad informativa.

La utilización de esta información se lleva a cabo bajo la exclusiva responsabilidad de los lectores. Para diagnóstico y formulación, consulte a un especialista.

Referencias

Exposetobacco. (2021). Índice global de interferencia de la industria tabacalera. Obtenido de A Global Tabacco Industry Watchdog: https://exposetobacco.org/es/indice-global/

Grand View Research. (2023). E-cigarette And Vape Market Size, Share & Trends Analysis Report By Product (Modular Devices, Rechargeable), By Distribution Channel (Online, Retail), By Region (APAC, North America), And Segment Forecasts, 2023 – 2030. GVR.

Hartmann-Boyce, J., Lindson, N., Butler, A., McRobbie, H., Bullen, C., Begh, R., . . . Hajek, P. (17 de Noviembre de 2022). ¿Los cigarrillos electrónicos pueden ayudar a las personas a dejar de fumar, y tienen algún efecto no deseado cuando se utilizan para este propósito? Obtenido de Cochrane Evidence Synthesis and Methods: https://www.cochrane.org/es/CD010216/TOBACCO_los-cigarrillos-electronicos-pueden-ayudar-las-personas-dejar-de-fumar-y-tienen-algun-efecto-no

La República. (2019). El mercado de productos de vapeo espera que la ventas crezcan 185% entre 2019 y 2023. Obtenido de Finanzas: https://www.larepublica.co/empresas/el-mercado-de-productos-de-vapeo-espera-que-la-ventas-crezcan-185-entre-2019-y-2023-2904109

La Rosa, G., Vernooij, R., Qureshi, M., Polosa, R., & O’Leary, R. (07 de Enero de 2023). Clinical testing of the cardiovascular effects of e-cigarette substitution for smoking: a living systematic review. Obtenido de Internal and Emergency Medicine: https://doi.org/10.1007/s11739-022-03161-z

NIH. (25 de julio de 2022). Tabaco y sustancias químicas. Obtenido de Biblioteca Nacional de Medicina: https://medlineplus.gov/spanish/ency/esp_imagepages/17193.htm#:~:text=Algunas%20de%20las%20sustancias%20químicas,hidrógeno%20y%20varios%20agentes%20cancerígenos.

OIT. (2003). Esfumarse como el humo. El futuro del empleo en la industria del tabaco. Obtenido de Organización Internacional de Trabajo: https://www.ilo.org/global/publications/world-of-work-magazine/articles/WCMS_081391/lang–es/index.htm#:~:text=Cada%20año%20se%20producen%20unos,tabaco%20en%20unos%20120%20países.

OMS. (16 de noviembre de 2021). El consumo de tabaco disminuye: la OMS insta a los países a invertir para ayudar a más personas a dejar de fumar. Obtenido de OMS: https://www.who.int/es/news/item/16-11-2021-tobacco-use-falling-who-urges-countries-to-invest-in-helping-more-people-to-quit-tobacco

Silva Numa, S. (23 de Abril de 2022). “Vapeadores y cigarrillos electrónicos”, ¿un nuevo desafío de salud pública? Obtenido de El Espectador: https://www.elespectador.com/salud/cigarrillos-electronicos-se-avecina-un-problema-de-salud-publica/

STATISTA. (2023). Valor de las ventas netas de las empresas líderes en la industria mundial del tabaco en 2021. Obtenido de Binenes de Consumo: https://es.statista.com/estadisticas/536689/facturacion-empresas-lideres-mundiales-en-tabaco/

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