Armando Matta R.
Especialista en Economía Ecológica y Ambiental
Economista
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La empatía es “un bien necesario no tangible”, es un bien como producto para fomentar relaciones sociales sanas y fuertes, que permiten llevar a cabo grandes alianzas y negocios fuertes, sin importar el tamaño del mismo, puesto que entender las razones de la persona que esta del otro lado de la mesa es básico para encontrar un punto en común que sirva como base de partida. La empatía es un bien necesario para la humanidad, quise arrancar desde un punto económico, pero es mucho más que eso. Nos hace bien , de primera mano es muy hermosa, sin ser una constante, todos hemos practicado la empatía. ¿Te has sentido mal por cualquier cosa que le haya sucedido a alguien? ¿Quién no ha visto una novela, película o serie, en la que el “malo” le genera desgracias al protagonista y queremos que pague por ello, además, que la víctima al menos se “gane la lotería” como compensación?
De un modo más personal, cuando observamos al mundo, la situación por la que atraviesan las personas de algún país, por la guerra, por los niños que no tienen la culpa de nada y sufren; y por un sinfín más de razones que nos tocan el corazón.
La empatía es un sentimiento que debe ser fundamental, es la base de una sociedad sana. Sin importar si profesas alguna religión o no, la realidad es que las palabras adjudicadas a Jesús son la clave de la felicidad del hombre, “Amaos los unos a los otros”. Son solo seis palabras (¿Y qué muestra de empatía más grande?), seis palabras que tienen todo el peso de la verdad y que sustentan que la verdad absoluta existe, (y hago énfasis en que no es determinante si crees o no en Dios o en alguna religión) el solo hacer lo que dijo, salvaría el mundo. Si yo te amo, no te lastimo y si tú me amas no me lastimas. Si yo te amo no estaciono mi carro enfrente de tu puerta para no molestarte, si tú me amas y ves que cometí la imprudencia de estacionar mi carro frente a tu pórtico no me enfrentarás con violencia, preguntarás porque lo he hecho, si yo te amo no te voy a vender los productos más caros, si tú me amas no vas a vender “kilos de 800 g”. Y esto no es socialismo, es sentido común. Pero como suelen decir, “El sentido común es el menos común de todos los sentidos” (Frase que algunos le adjudican al filósofo, Dr. Edward “Ed” de Bono y otros a Voltaire).
En este acto de amor, la base fundamental es la empatía, te pones en el lugar del otro para “saber” cómo se siente, para adaptarte a la situación, para entender porque hace lo que hace. Si alguien va muy tarde al trabajo porque tuvo que llevar a su hijo a la escuela y tú te pones en su lugar, no tendrás problema en dejarlo pasar antes, pero si él se pone en tu lugar, se levantará más temprano y hará la fila porque sabrá que tú también tienes responsabilidades y llegaste antes, sabrá que debe respetar el orden de las cosas.
En este círculo de amor y empatía llega Estados Unidos a ser protagonista, decide que solo “Él” puede y debe ayudar al pueblo Latinoamericano y en su infinito entendimiento pone en ejecución su plan de amor.
─ ¿Cómo podré ayudarlos? ─ Se pregunta.
─ Muy fácil, veo que estamos en los años 60´s y muchos países de la región han mostrado un crecimiento constante y sostenido durante varias décadas, entonces para ayudarlos, les voy a prestar mucho dinero. ─
Y efectivamente, sin dudarlo, llevaron a cabo su plan como lo había previsto y el mercado latinoamericano se llenó de dólares que provenían de le FED (Reserva Federal de Estados Unidos). La región estaba creciendo sostenidamente, lo que les permitió incrementar su capacidad de endeudamiento y con ello podían acceder a este mercado de capitales internacionales.
Las economías latinoamericanas crecieron a muy buen ritmo a partir de la segunda guerra mundial, diferentes causas se sumaron a la razón, entre ellas se encontraban el crecimiento exponencial de los Estados Unidos como potencia mundial, aunque desde la primera guerra mundial ya se habían convertido en potencia, se hicieron con la mayor cuota del mercado internacional, la crisis de 1929 los llevó a una gran depresión, misma que empezaban a salir desde 1932 (Comín, 2010) pero que la segunda guerra mundial definitivamente les daría el impulso final que los catapultó como la economía hegemónica.
Tanto así, que tuvieron el poder y liderazgo suficiente para determinar que su moneda sería la que llevara la batuta en todo el comercio mundial. Así, su moneda era la intermediadora en cada proceso comercial, lo que aumentaría su demanda indiscutiblemente y con ello su valor. Al principio el dólar se respaldaba con oro, pero cuando resultó impagable, simplemente y de manera autónoma terminaron con esa convertibilidad, pero el dólar seguiría siendo la moneda de referencia (Tortella, 2005).
Las décadas transcurrieron y los países latinoamericanos seguían mostrando gran dinamismo, tal era el caso de México, Brasil, Argentina, Chile, Colombia, Perú, entre otras, aunque no todas mostraban la misma energía, lo que si era claro es que en general parecían encaminarse al desarrollo y un mejor ingreso (Cárdenas, 2003).
El inicio de estos préstamos se remonta desde los años 40´s, pero a partir de los años 50´s y 60´s se incrementaron significativamente y no pararon en los 70´s, aunque menor, si fue una suma considerable, el dinero se usaba “para seguir impulsando el desarrollo interno”, en esos años se usó el modelo de sustitución de importaciones, que es un modelo económico en el que los países desarrollan la industria interna para dejar de importar los productos de otros países, fabricándolos en casa, es un modelo criticado, porque cuando el Estado apoya la industria nacional, pero cierra el mercado internacional, la industria puede sufrir un atraso en la parte técnica y de desarrollo, puesto que no tienen competencia. Sin embargo, era una respuesta congruente, porque no era el único mercado cerrado al comercio exterior, el mundo se cerro al unísono y era una época de proteccionismo generalizado, seguir con las importaciones sin protegerse, hubiera sido más incongruente, pues venderías productos baratos y comprarías aún más caro (Hobsbawn, 1998).
El “boom petrolero” también ayudó al crecimiento, no todas las economías gozaron de esta ventaja, pero muchas si lo lograron. Entonces, el aumento de la demanda de materias primas en el mundo, la sustitución de importaciones, el petróleo y los créditos frescos internacionales continuaron su tarea de crecimiento. Estamos hablando de cifras arriba del 5%, 6%, incluso momentos en el que el crecimiento fue arriba del 10%.
Como en las películas, cuando todo parece marchar “viento en popa”, algo tiene que pasar, y así fue. Una crisis en el mercado petrolero causó pánico y baja en los precios, pero eso no fue todo, la FED, de un momento a otro decidió aumentar las tasas de interés de sus acreedores a cifras que las volvieron impagables, muchas economías entraron en banca rota y cancelaron los pagos a USA al verse imposibilitados. Es justo decir, que Estado Unidos también afrontaba una crisis, pero su manejo fue completamente enfocado en “no busco quien me la haga, sino quien me la pague” puesto que no se buscaron alternativas de reestructurar las deuda, o mantener el interés pactado, por el contrario, al subir las tasas, no solo perjudicó a América Latina de forma directa, sino que se generó una fuga de capitales, ya que con un interés más alto, los inversionistas sacaron el dinero de las economías en crecimiento para buscar mejores rendimientos. Tanto que destruyó la economía de la región, y la crisis latinoamericana fue tan fuerte que se le nombró como “La Década Perdida” (Moreno Brid & Ros, 2010).
La deuda creció tanto, que no había forma de pagarla, así que la FED le seguía prestando dinero para que con deuda pagara la deuda (vaya lógica) y así no se preocuparan tanto, los grandes y honestos analistas financieros aceptaban los nuevos paquetes de ayuda económica, hasta que, con la subida de las tasas de interés de la FED, la deuda se volvió exorbitante y además les cerraron la puerta a nuevos préstamos, ya no podías ni pagar, ni pedir para invertir. Algo así como hundir tu cabeza en el agua y pedirte que respires profundo para calmarte.
Una fuga de capital, una deuda impagable, una crisis petrolera y por supuesto cabe mencionar, unos estados que siempre han sido corruptos, fueron la mezcla perfecta para detener y eliminar el crecimiento sostenido que por tres décadas estaban mostrando. Los años 80’s fueron una época marcada por crisis, deuda impagable, administraciones desesperadas y planes de reestructuración, pero jamás se volvió a conseguir los crecimientos mostrados anteriormente, y el consenso de Washington establecido a partir de los 90’s fue la gota que derramo el vaso, fue el inicio marcado de lo que denominan “el neoliberalismo”, para algunos no existe, para otras es parte de su discurso, lo que si es real, es que ese consenso no fue más que las normas de Estados Unidos sobre ¿Qué?, ¿Cómo? y ¿Cuándo? Latinoamérica debía dirigir sus economías (Stiglitz, 2003).
A mi manera de ver las cosas, ese intervencionismo no fue más que una guerra comercial con Latinoamérica, frenando su desarrollo, además, nos conocía muy bien y sabía que una herencia española no pasaría desapercibida, la corrupción, (aunque ya no es culpa de los españoles, ¡ellos tienen a sus corruptos!) “sabía” de antemano que era la estrategia perfecta para evitar que estas economías fueran independientes y siguieran su propio camino, tres pesos a un presidente es más que suficiente para permitir un endeudamiento multimillonario.
Hoy día, su guerra comercial la enfrenta con China, el crecimiento económico, su influencia en el mundo, y su desarrollo tecnológico es una amenaza real y tangible para la supremacía estadounidense. Se están viendo superados en muchos aspectos y vamos a hacer un recorrido breve sobre ellos.
China se posiciona como otro líder mundial de influencia, con su intervención directa logró un tratado de paz entre las naciones de Arabia Saudita e Irán, relaciones fragmentadas desde hace siete años y con mucha tensión en Oriente Medio, Estados Unidos no intervino porque no tiene influencia sobre Irán y China en cambio, mantiene una relación comercial muy importante con ambos (Von Hein, 2023).
China tampoco quiere seguir comerciando en dólares, porque de esta manera la demanda de esa moneda disminuye y el yuan, la moneda local de China aumentará la demanda en el mundo y será más estable y con más valor. No necesita ir buscando países donde poder abrir fábricas porque su mano de obra le permite pagar bajos salarios, solo lo hace si el mercado es muy lejano y le resulta más beneficioso fabricar desde esa región que transportar la mercancía.
El desarrollo tecnológico que tiene China actualmente, es muy importante, tiene empresas posicionadas globalmente en muchos sectores, al principio con la fama de ofrecer productos malos, pero ahora, la historia es diferente y produce acta tecnología de todo tipo, autos, televisores, celulares, computadoras, equipo de comunicación, etc. (Hechavarría, 2021).
Así que hoy día, Estados Unidos está empecinado en detener el avance chino a como dé lugar, sin entrar en teorías de conspiración, hay cosas que son una realidad, como la orden que ha dado el gobierno estadounidense de no vender tecnología avanzada (micro chips) a los chinos de ninguna nación accidental, Los Países Bajos ya anunciaron que no le venderán la tecnología para producir los chips (Sanhermelando, 2023), según ellos muy a regañadientes, pero si papá dice, hay que hacerle caso y traerle las pantuflas. Es declarado públicamente como una amenaza a la seguridad nacional y como enemigo del “Mundo Libre” (Jiménez, 2023).
Como conclusión adicional, siendo Estados Unidos una potencia mundial, querría mantener el control de las economías cercanas a ellas, ya que le servían como proveedores de materias primas y de mano de obra barata, su estancamiento, corrupción y división, la hicieron perfecta para desarrollar ese papel, esta misma proximidad, permitió mantener la economía de la región dinámica y con posibilidades de crecer.
Si China se convierte en el nuevo líder y toma el control de la producción global, será motivo de celebración para muchos, pero la realidad es que no es beneficiosa, pues su comercio demandará Yuanes en lugar de Dólares, moneda en la que estos países no tienen reservas, bajando la demanda de dólares su valor se reducirá y el tipo de cambio lo hará en consecuencia, la lejanía hará más costoso el comercio, las materias primas bajaran su demanda ya que elegirá primero de las que disponga de primera mano, la mano de obra barata no es necesaria, y el desarrollo de los países será tarea más dura porque el dinero no se crea de la nada, se mueve entre mercados y con nuevos integrantes con mucho capital, deja a muchos integrantes con poco capital. No creo que sea de festejar, pero definitivamente si es motivo de preparación. Estas economías deben cambiar sus modelos enfocados en ser más competitivos y dejar de depender de un cliente para mantener su balanza comercial positiva, un desarrollo interno para la demanda nacional y un excedente para la balanza comercial.
“Soy Armando Matta, todo es debatible ¿Tú qué opinas?”.
Referencias
Cárdenas, E. (2003). El populismo económico mexicano, 1972 – 1981. En E. Cárdenas, La política económica en México, 1950 – 1994. (págs. 86-117). México: El Colegio de México, Fideicomiso Historia de las Américas y FCE.
Comín, F. (2010). La Economía Internacional en los años de entreguerras (1914-1945). En F. Comín, Historia económica mundial Siglos X-XX (págs. 287-337). Barcelona: Crítica.
Hechavarría, C. L. (01 de diciembre de 2021). La estrategia de desarrollo tecnológico de China en el período 2006-2020. Alcance y perspectivas. Obtenido de Política China: https://politica-china.org/areas/sociedad/la-estrategia-de-desarrollo-tecnologico-de-china-en-el-periodo-2006-2020-alcance-y-perspectivas
Hobsbawn, E. (1998). Historia del Siglo XX. Buenos Aíres: Crítica.
Jiménez, M. (07 de febrero de 2023). Joe Biden: “Si China amenaza nuestra soberanía, actuaremos para protegernos”. Obtenido de El País: https://elpais.com/internacional/2023-02-08/joe-biden-si-china-amenaza-nuestra-soberania-actuaremos-para-proteger-a-nuestro-pais.html
Moreno Brid, J. C., & Ros, J. (2010). Los Años de Ajuste, La Década Perdida y El Proceso de Reformas. En J. C. Moreno Brid, Desarrollo y Crecimiento en la Economía Mexicana. Una Perspectiva Histórica. (págs. 197-235). Mexico: FCE.
Sanhermelando, J. (9 de marzo de 2023). Países Bajos restringirá las exportaciones de máquinas de fabricación de chips a China. Obtenido de El Español: https://www.elespanol.com/invertia/observatorios/digital/20230309/paises-bajos-restringira-exportaciones-maquinas-fabricacion-china/747175399_0.html#:~:text=Nuevo%20episodio%20en%20la%20guerra,produce%20la%20compañía%20holandesa%20ASML.
Stiglitz, J. E. (2003). El rumbo de las reformas. Hacia una nueva agenda para América Latina. Revista de la CEPAL, 7-38.
Tortella, G. (2005). Un Nuevo Orden Social Demócrata. En G. Tortella, Los orígenes del siglo XXI. Un ensayo de historia social y económica contemporánea. (págs. 365-391). Madrid: Gadir.
Von Hein, M. (27 de marzo de 2023). China, el nuevo mediador en Oriente Medio. Obtenido de DW: https://www.dw.com/es/china-el-nuevo-mediador-en-oriente-medio/a-65142471