Durante esta semana, el municipio de Querétaro clausuró tres establecimientos en el barrio San Francisquito por operar sin licencia y ser utilizados de forma irregular como refugio por trabajadoras sexuales durante operativos de inspección.

Así lo informó Juan Carlos Arreguín, secretario técnico de la Secretaría de Gobierno municipal, quien detalló que los negocios —un local de telefonía celular, un salón de belleza y un centro de atención a adicciones— fueron detectados durante rondines de vigilancia en una zona habitacional que se busca preservar por su valor tradicional.
Aunque no se comprobó que los inmuebles fueran usados directamente para ejercer el sexo servicio, se identificó que entre 14 y 18 personas se resguardaban en ellos. Ante esto, el funcionario subrayó que no existe una zona de tolerancia formal para esta actividad, y que continuarán los operativos para inhibirla en el barrio.
Las multas por operar sin licencia pueden alcanzar hasta las 2 mil UMAS, lo que equivale a más de 226 mil pesos. Las autoridades reiteraron que la instrucción del alcalde es mantener vigilancia constante en la zona y proteger su carácter residencial.